Los coches nuevos en Estados Unidos deberán hacer ruido en 2014. El ritmo con el que los coches híbridos se están introduciendo en EEUU resulta alarmante cuando se plantea una situación como la siguiente, por eso, la necesidad de dotar de elementos sonoros a los coches silenciosos como híbridos o eléctricos es algo inmutable.
Ya desde 2010 se “pensó” sonorizar los automóviles silenciosos por la consideración de personas invidentes y su riesgo en la carretera.
Hemos visto como la rápida comercialización de los coches híbridos y eléctricos, supone un descenso en la contaminación acústica. Pero; ¿será necesario un poco de ese ruido para evitar accidentes contra personas invidentes?, entre otras cosas.
En dicho caso, los sistemas sonoros que se instalen en los automóviles deberán ser autónomos, es decir, que
detecten al peatón sin la ayuda del conductor, para que de éste no dependa la
seguridad del resto de personas.
Este debate no queda ahora tanto en el aire, ya que la NHTSA ha seguido echando leña al fuego, y ha dicho que en 2014 se tomarán medidas prácticas, ¡sí o sí!. Se espera un coste de casi 78 millones de euros, dicen las
grandes industrias que llevarán a cabo el proyecto.
Más o menos por la misma fecha en Alemania, se igualaba la situación de Europa con la de EEUU de la mano de Audi, que ya realizaba sus primeras pruebas de
sonido autónomo para sus automóviles. Según sus estudios, el campo auditivo aporta unos 360º de visión del espacio frente a los 180º que solo aporta la visión en la ausencia de nuestras capacidades auditivas. También hay que valorar que un coche eléctrico deja de ser silencioso a partir de los 25 km/h aproximadamente, ya que es cuando la fricción del asfalto y el aire del vehículo se deja de percibir.
En las políticas de movilidad se encuentra la lucha entre
los coches que emiten sonido y los que no, ya que se trata de lograr un nivel
de empatía social y medioambiental, pero por supuesto, garantizar la seguridad de
estas personas invidentes. Hay
estudios que dicen que Europa carece de esa empatía social en la circulación
y en cuanto a movilidad en los espacios compartidos se refiere. Europa sufre una necesidad importante de buena
convivencia entre un peatón y un conductor, debido a las características calles
de circulación “mixta”.
¡Hola!
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